Santo Domingo.- En una conferencia de prensa celebrada en el salón Las Cariátides del Palacio Nacional, el presidente Luis Abinader presentó este lunes un conjunto de acciones estratégicas diseñadas para transformar a la República Dominicana en un país plenamente desarrollado. Este ambicioso proyecto, que busca duplicar el Producto Interno Bruto (PIB) del país para el año 2036, requiere del compromiso y apoyo de todos los dominicanos, según destacó el mandatario.
Durante su intervención en "La Semanal con la Prensa", el presidente Abinader subrayó la importancia de superar los desafíos actuales para alcanzar el desarrollo pleno. Hasta la fecha, el gobierno ha enfrentado y superado obstáculos significativos como la pandemia del COVID-19, la paralización de sectores clave, el conflicto Rusia-Ucrania, la desaceleración económica para combatir la inflación, y el conflicto fronterizo.
Abinader también resaltó el reconocimiento recibido por organismos internacionales, los cuales valoran el liderazgo económico de la República Dominicana en América Latina. Este respaldo refuerza la confianza en la capacidad del país para alcanzar sus metas de crecimiento y desarrollo.
El mandatario detalló que convertirse en un país plenamente desarrollado implica crear 1,7 millones de nuevos empleos, triplicar el salario medio, eliminar la pobreza extrema, extender la expectativa de vida en seis años, alcanzar un mayor grado de inversión y consolidar a la República Dominicana como la economía más próspera de Latinoamérica.
Para lograr estos objetivos, Abinader enfatizó la necesidad de implementar reformas en diversas áreas críticas, incluyendo la institucionalidad, justicia y democracia, infraestructura y energía, estabilidad fiscal y macroeconómica, salud y educación, dinámica laboral e innovación, tecnología y dinámica empresarial.
Entre las acciones transversales que ya se están implementando destacan la independencia de la justicia, la lucha contra la corrupción, la reducción de la burocracia, proyectos de leyes de responsabilidad fiscal, la reforma de la policía y la seguridad ciudadana, la ley de aduanas, y el fomento de las exportaciones e inversión extranjera directa. También se mencionaron el plan nacional de logística de carga, el plan de movilidad urbana y el plan nacional de desarrollo territorial.
Estas acciones han permitido avances significativos en importantes indicadores internacionales, tales como el acceso a cuentas bancarias y ahorros, el control de la corrupción, la regulación energética, el empleo intensivo en conocimiento, la apertura comercial e internacional, la legitimidad del Estado, y la calidad crediticia del país. Asimismo, se han registrado mejoras en la distribución del ingreso, el acceso al transporte y a la vivienda, y el consumo de energía renovable.
El presidente Abinader también mencionó la necesidad de acciones sectoriales y territoriales para alcanzar la meta de desarrollo, incluyendo la creación de una comisión 2035, un comité sectorial, un plan y cronograma detallados, y una unidad de gestión de resultados.
El presidente Luis Abinader ha delineado una visión ambiciosa pero alcanzable para transformar la República Dominicana en un país plenamente desarrollado en la próxima década. Con el compromiso de todos los dominicanos y el apoyo de la comunidad internacional, este plan busca duplicar el PIB del país para el 2036, estableciendo un camino claro hacia un futuro próspero y sostenible.
