El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció que los aranceles recíprocos que planea imponer afectarán a todos los países. Esta medida, que presentará el próximo miércoles, ha sido bautizada por el mandatario como el ‘Día de la Liberación’.
Trump declaró que su plan abarcará a todas las naciones, no solo a aquellas con mayores desequilibrios comerciales. Durante una conversación con periodistas en el Air Force One, afirmó que «se empezaría con todos los países». Además, señaló que esta decisión busca proteger la economía estadounidense y fortalecer la industria local.
El anuncio ha generado expectativas, ya que la medida podría afectar significativamente el comercio internacional. Trump enfatizó que su administración está comprometida en asegurar condiciones justas para los productos estadounidenses.
Relaciones con Rusia y posible exención de aranceles
En cuanto a Rusia, Trump expresó que no planea imponer aranceles secundarios al país euroasiático. «Ciertamente no me gustaría ponerle aranceles secundarios a Rusia», afirmó. Sin embargo, advirtió que, si fuera necesario, la situación no sería favorable para el gobierno ruso.
Trump también comentó sobre su relación con el presidente ruso, Vladímir Putin. Aseguró que, a pesar de las tensiones recientes, ambos líderes mantienen una relación cordial. «Lo conozco desde hace mucho tiempo, siempre nos hemos llevado bien», señaló.
Por otro lado, el presidente estadounidense reiteró que Putin desea una resolución pacífica del conflicto en Ucrania. Esta declaración refleja la disposición de ambas partes para encontrar soluciones diplomáticas que eviten mayores tensiones.
Expectativas para el ‘Día de la Liberación’
El anuncio oficial del plan arancelario se realizará el próximo miércoles. Se espera que Trump detalle las medidas específicas y explique cómo afectarán a los socios comerciales de Estados Unidos. Esta estrategia podría cambiar el panorama económico global y redefinir las relaciones comerciales del país.
Los analistas advierten que estas medidas podrían provocar reacciones de otros países, lo que aumentaría las tensiones comerciales. Sin embargo, Trump insiste en que su objetivo es garantizar que Estados Unidos reciba un trato justo en el comercio internacional.
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