Juan Soto y abril: un romance complicado

Juan Soto abril no parece ser una combinación ganadora. Año tras año, el talentoso jardinero dominicano ha comenzado la temporada de Grandes Ligas con números por debajo de sus estándares, y 2025 no ha sido la excepción.

A falta de solo dos días para que finalice el mes de abril, Soto acumula tres jonrones, 12 carreras impulsadas y un promedio de bateo de .248. Aunque su porcentaje de embasarse se mantiene sólido en .374 gracias a su habitual paciencia en el plato (21 boletos), su slugging de .396 y 18 ponches reflejan una falta de poder que sorprende viniendo de uno de los bates más temidos del béisbol.

Y aunque estas estadísticas podrían parecer aceptables para cualquier pelotero, en el caso de Soto no lo son. Su historial lo confirma: abril ha sido, desde su debut en 2018, el mes menos productivo de su calendario.

Un patrón que se repite

Desde su llegada a las Mayores, Juan Soto abril ha mostrado un patrón claro: arranca lento. En su carrera batea apenas .260 en este mes, con el menor número de hits, dobles y el OPS más bajo (.853) de toda la temporada. Incluso su OBP y SLG caen por debajo de los niveles que normalmente lo colocan entre los mejores del juego.

La excepción fue abril de 2024, cuando con los Yankees de Nueva York firmó su mejor inicio de campaña: .325 de promedio, 8 jonrones y 25 impulsadas. Pero este año, ya con los Mets, ha vuelto a ese ritmo apagado de otros abriles.

¿A qué se debe? Algunos apuntan a su enfoque más conservador en el plato, más enfocado en embasarse que en buscar hacer daño. Eso le funciona en ciertas etapas, pero al inicio del año puede limitar su impacto ofensivo, sobre todo cuando su equipo necesita producción.

Lo positivo es que la historia también dice que mayo suele ser un mes de repunte para Soto. Y con los Mets necesitando con urgencia que su ofensiva se active, todas las miradas estarán puestas en si el dominicano vuelve a encender su bate en los próximos días.

Por ahora, abril sigue siendo su piedra en el zapato. Pero si algo ha dejado claro Juan Soto es que tiene el talento y la mente para ajustar y volver a brillar cuando más se le necesita.