¡Qué manera de cerrar unos Juegos Olímpicos, amigos oyentes! París 2024 se despidió por todo lo alto en una ceremonia que combinó tradición, modernidad y un toque cinematográfico inolvidable. El presidente del Comité Olímpico Internacional, Thomas Bach, no escatimó en elogios, calificando estos Juegos como «sensacionales», o mejor dicho, «Sen(a)sacionales», jugando con el nombre del famoso río Sena que cruza la capital francesa.
Durante su discurso en el Estadio de Francia, Bach destacó que estos fueron los Juegos de una nueva era, un evento que trascendió lo deportivo y dejó huella en la cultura global. «Queridos amigos franceses, se han enamorado de los Juegos Olímpicos. Y nosotros nos hemos enamorado de ustedes», dijo, subrayando el éxito rotundo de París 2024.
Pero la sorpresa de la noche fue, sin duda, la participación de Tom Cruise. Así es, la estrella de cine descendió en rápel desde el techo del estadio, recibió la bandera olímpica de manos de la gimnasta Simone Biles, y con ella en mano, montó en motocicleta, recorriendo París en un espectacular videomontaje que culminó en Los Ángeles, junto al icónico cartel de Hollywood. ¡Un final digno de película, que nos dejó a todos ansiosos por lo que nos depararán los Juegos de Los Ángeles 2028!
Así que amigos, desde ya nos preparamos para una nueva aventura olímpica. ¡Los Ángeles, allá vamos!
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