Últimamente muchos hemos buscado adoptar un perrito de mascota para que forme parte de nuestra familia, pero la convivencia con ellos no siempre es fácil, ya que debe adaptarse a ciertas reglas en casa. Por ello, Diariamente Ali les trae unos consejos para lograrlo efectivamente:
¿Por qué es importante educar a nuestro perro?
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Corregirás su conducta.
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Mejorarás el vínculo afectivo.
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Entenderás mejor a tu mascota.
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Lograrás una convivencia familiar feliz.
Enséñale a obedecer cuando lo llames
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Aléjate a 1 o 2 metros de distancia, llámalo por su nombre y dile “ven aquí”.
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Usa palabras cariñosas al llamarlo.
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Cuando llegue hacia ti ofrécele un premio, como una croqueta.
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Repite este ejercicio durante 10 minutos.
Evita los ladridos en exceso
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Sácalo a pasear diariamente para evitar el estrés en el perro.
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No lo regañes en exceso y genérale un ambiente tranquilo.
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Cuando ladre, acércate y acarícialo para que se calme.
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Distráelo con algo que le guste, por ejemplo, con un juguete.
Debes sacar a pasear a tu perro un mínimo de 30 minutos diarios
Enséñale a ir al baño
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Establece horarios diarios de paseos para sus necesidades y respétalos.
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Si hace sus necesidades dentro de casa, no lo regañes, solo límpialo e ignóralo.
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Si las hace fuera, prémialo con una croqueta. Así entenderá que es mejor hacerlo fuera de casa.
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Si deseas que use un lugar específico dentro de casa puedes comprar una bandeja de entrenamiento.
Los perros suelen hacer sus necesidades después de 10 – 30 minutos de comer
Enséñale a quedarse solo
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Repite las acciones típicas que hacemos antes de salir de casa, pero sin llegar a salir.
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Sal de casa, atravesando la puerta, pero volviendo a entrar enseguida.
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Déjalo solo durante unos minutos, luego de un paseo o juego y repite esta rutina.
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Conforme se queda tranquilo solo puedes ir aumentando el tiempo poco a poco.
Enséñale a no morder
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Levanta un poco la voz y di su nombre acompañado de un ‘No’ si lo ves destruyendo algo que no debe.
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Si aún no lo suelta, dale un toque con tus dedos a la altura de su cadera.
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Si lo soltó, colócale en la boca su juguete para morder y felicítalo por morder el juguete.
Si tu mascota no muerde jugando, sino por agresividad, acude a un adiestrador
Recuerda tener paciencia y cariño con tu perro y verás que todo saldrá bien. ¡Es el engreído de todos!
